Rinitis

Temas de Rinitis/Sinusitis

Rinitis

La Rinitis Alérgica (RA) ó alergia nasal es el padecimiento alérgico más frecuente, a cualquier edad. Se calcula que aproximadamente un 10 a 15 % de la población general la padece, y, en sí, es el padecimiento nasal más frecuente. Dependiendo de la intensidad, puede ser incluso incapacitante, ó puede disminuir la calidad de vida de la persona en forma significativa, aunque por sí mismo el padecimiento no es peligroso.

¿Qué es la Rinitis Alérgica?

La RA es un padecimiento inflamatorio de la mucosa (membrana interna) y las estructuras internas de la nariz, de carácter crónico, ya sea intermitente ó recurrente, ó de forma continua, que sucede en personas de cualquier edad, pero que tiene una fuerte tendencia genética (heredable). Puede padecerse por períodos prolongados de la vida, ó por toda la vida.

La causa de ése proceso inflamatorio es una reacción "aprendida" del organismo, por el contacto en la mucosa nasal con partículas protéicas, -generalmente innocuas para la mayoría -, lo que estimula la producción de ciertos anticuerpos, los anticuerpos "IgE", que son los responsables directos de la liberación de factores químicos pro-inflamatorios potentes (histamina, etc.) de los mastocitos (células de nuestro sistema de defensa). Una vez producidos y liberados éstos mediadores químicos en la mucosa nasal, son los causantes de todas las molestias de éste padecimiento.

¿Cuáles son sus Síntomas?

Sus síntomas son variados, pero predominan la rinorrea (escurrimiento de moco) hacia adelante ó por detrás de la nariz, hacia la garganta, la obstrucción ó congestión nasal, los estornudos frecuentes, habitualmente en accesos prolongados, y el prurito ó comezón nasal. Aunque estos son los síntomas principales, es muy frecuente que se acompañe de una ó varias de las siguientes molestias: comezón de ojos, lagrimeo, intolerancia a la luz, dolor de cabeza en la zona fronto-nasal, resequedad de nariz, sangrado mínimo ó franco de las fosas nasales, costras de moco, comezón de oídos, sensación de oídos tapados, comezón de paladar y/ó de garganta, "carraspera", ardor de garganta matutino ó tos.

Lo más frecuente es que se presente asociada a molestias significativas de los ojos, por lo que es mejor llamarla Rinoconjuntivitis Alérgica en ésos casos. También la gran mayoría de la gente que la padece, la sufre por períodos bien definidos del año (Estacional), y son menos los que la padecen en forma continua (Perenne).

En la gran mayoría de los casos, se cuenta con antecedentes alérgicos en general por una ó ambas ramas familiares, esto es, la Rinitis Alérgica tiene un carácter hereditario ó genético bien definido. Más bien, lo que se hereda es la predisposición ó capacidad para crear alergias, de uno ú otro tipo. Sin embargo, eso no es todo, se necesita de la exposición repetitiva ó constante a partículas protéicas inhaladas ó ingeridas con características bioquímicas bien definidas, que llamamos alérgenos, para que se inicie ó "despierte" el fenómeno de alergia.

Entre los alergenos más frecuentes se encuentran los pólenes de zacates, de ciertos árboles, y de malezas; el polvo de casa, el epitelio (pelo) de animales, ácaros del polvo, esporas de hongos, partículas de insectos, ó inclusive algunos alimentos. La mayoría de los que padecen Riniti Alérgica son alérgicos a muchos de estos alérgenos.

Tratamiento

Este depende del grado ó intensidad, de si es estacional exclusivamente ó perenne, y de qué y de cuántos alergenos sean los responsables. Sin embargo, los tratamientos siempre incluyen medicamentos que supriman las molestias principales, como los antihistamínicos, que quitan la mayoría de las molestias y de los cuales existe una gran variedad, incluso frecuentemente se asocian a descongestivos para mejorar el efecto, sobre todo si predomina la obstrucción nasal. Dependiendo del caso, pueden usarse también anti-inflamatorios del tipo de los esteroides ó cortisonas, ya sea aplicadas directamente en la nariz ó por vía oral.

Es importante recalcar que no recomendamos el uso de cortisonas inyectadas de alta potencia y de larga duración como tratamiento de ningún tipo de Alergia, debido a la alta posibilidad de efectos adversos serios a largo plazo.

Además de los medicamentos, el tratamiento debe de incluir un control ambiental específico, esto es, debe de evitarse, en la medida de lo posible, el contacto con los alergenos responsables de su alergia, por lo que es necesario haberlos identificado perfectamente bien por medio de las pruebas especiales.

Cuando los alergenos responsables son susceptibles de disminuirse significativamente, ó eliminarse por completo, se reduce al mismo tiempo la necesidad de uso frecuente ó continuo de medicamentos, y se puede evitar la necesidad de inmunoterapia. Esta forma de tratamiento se reserva para los que tienen alergias moderadas ó intensas a alergenos poco ó nada evitables (como los pólenes y el polvo de casa), y siempre y cuando el control de las molestias sea difícil, a pesar de tratamientos adecuados, ó cuando el pronóstico a largo plazo sea malo, según el conjunto de estudios alergológicos realizados.

¿Cómo Funciona la Inmunoterapia?

La inmunoterapia consiste en aplicar dentro de la piel aquellos alergenos a los que el individuo resultó alérgico, en forma de diluciones acuosas, por medio de inyecciones repetitivas, con una frecuencia sostenida, y en dosis lenta, pero progresivamente mayores, y por tiempo prolongado (generalmente por 3 años). Existen diferentes esquemas (en cuanto a frecuencia ó velocidad de incremento de dosis) aplicables, según sea el caso, esto lo tendrá que definir el especialista. Este sistema de tratamiento logra inducir cambios inmunológicos (producción de anticuerpos y células especializadas) que logran "bloquear" al final de cuentas la reacción alérgica natural que se tenía, con mayor ó menor grado de eficacia. En la mayoría de los casos el bloqueo es total y sostenido por muchos años ó por toda la vida, sin embargo existen casos en los que la desensibilización no es completa ó se tiende a perder en forma relativamente rápida. En general a mayor intensidad de alergia, son menores las posibilidades de una curación definitiva.

Hablando en porcentajes, cuando la Rinitis inicia en la infancia, aproximadamente la mitad de los casos entrarán en remisión (se "curarán") antes de los 14 años de edad; sin embargo, más de la mitad volverán a tener síntomas en la edad adulta, de mayor ó menor severidad. Cuando la rinitis inicia en la edad adulta, generalmente ya no se quita (en forma natural).

Otro aspecto importante a señalar, es que la Rinitis Alérgica, es sólo una de las formas de manifestarse de las alergias respiratorias, y que raramente es la única manifestación alérgica en ellas, pues frecuentemente se asocia a Conjuntivitis, problemas de Otitis Media, Sinusitis, crecimiento de Adenoides y Anginas, ó Asma Bronquial. De hecho, todos estos padecimientos pueden ser realmente complicaciones de una alergia inicialmente nasal, a la que no se le ha hecho caso ó no ha recibido tratamientos suficientemente efectivos.

La mayoría de la gente que padece Rinitis la tiene en grados relativamente leves y que no interfieren significativamente con sus actividades normales, sin embargo, en muchos casos, a pesar de no ser tan leve, tiende a minimizarse su importancia, ó se "aprende" a vivir con las molestias, y no se le dá importancia hasta que aparecen las primeras complicaciones serias, como los problemas de otitis y audición, las sinusitis, los problemas de las Anginas y Adenoides y el Asma Bronquial, que requieren de tratamientos más complicados (muchas veces quirúrgicos) y más costosos.

Aproximadamente la mitad de los que padecen Rinitis Alérgica padecerán también de Asma Bronquial unos pocos, ó muchos años después del inicio de los síntomas nasales, por lo que, hasta cierto punto, puede prevenirse la aparición del Asma si se logra detener el proceso alérgico desde los primeros años.

Para mayor información, consulte a su Alergólogo

Información obtenida de COMPEDIA